2017 podría ser un año que pase a la historia por la cantidad de robots desarrollados en el terreno de la medicina que presentaron resultados extraordinarios de funcionalidad en la ejecución de procedimientos muy delicados.
El más reciente logro en este campo ha sido conseguido por un autómata desarrollado por ingenieros de la Universidad de Oxford, que cumplió con éxito inesperado el primer ensayo clínico de la historia con un robot realizando una cirugía de retina al interior del ojo humano.
De acuerdo con un reporte de IBTimes, el robot ejecutó seis cirugías de extracción de membrana retiniana, en paralelo que otro grupo con el mismo número de pacientes se sometió al mismo procedimiento pero con un equipo de humanos experimentados en este procedimiento. Sobra decir que la intervención es extremadamente delicada.
Al final, sólo dos de los pacientes operados por el robot presentaron hemorragia de ojo y daño leve de retina, un daño colateral usual durante esta cirugía. En contraste, en el grupo operado por humanos cuatro pacientes presentaron estos mismos daños.
La reducción significativa de hemorragia y el rango de efectividad del robot han terminado por comprobar la precisión y confiabilidad de este tipo de autómatas en el terreno médico.
Parece que los obreros no serán los únicos que podrían perder su trabajo.
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