Para nadie resulta una novedad que las Fuerzas Armadas de Estados Unidos utilizan los últimos avances científicos para manipular elementos biológicos como posibles herramientas en caso de futuros conflictos bélicos. La mayoría de las veces estos experimentos están ligados con armas biológicas, pero el caso que ahora les presentamos es distinto, ya que se centra en cuidar la flora intestinal de sus soldados.
De acuerdo con una investigación difundida por la Universidad de Rice (vía Scientific American), un grupo de investigadores, líderes en el terreno de manipulación de material genético y virus, ha logrado modificar una versión de la bacteria E. coli, con la finalidad de que proteja a soldados de la Marina y el Ejercito, cuando se encuentren en misiones extranjeras, combatiendo malestares tales como trastornos metabólicos, ligados a la ansiedad y depresión.
(CC) U.S. Pacific FleetEl reconocido biólogo sintético Jeff Tabor, ha liderado este proyecto durante tres años, con el apoyo de la Oficina de Investigación Naval (ONR), para modificar genéticamente una especie inofensiva de la bacteria Escherichia Coli , que forma parte de la flora del intestino humano, y que ahora se ha convertido en un organismo probiótico comestible que puede prevenir el desarrollo de varios trastornos al ser implmentado.
La modificación de esta bacteria intestinal E. coli ha permitido integrarle una especie de bio-sensores, capaces de detectar la presencia de sustancias químicas distintivas de diversas enfermedades, reaccionando ante ellas para neutralizarlas, manipulando el ambiente intestinal del soldado para mantenerlo saludable.
Esta bacteria inteligente promete mucho, sin embargo le queda bastante camino por recorrer aún, ya que su funcionamiento sólo ha sido comprobado en un grupo de ratones en diversas pruebas de laboratorio. Aunque el ideal es que eventualmente se implemente en militares, para crear super soldados.
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